Jerez, 1995, 250 c.c.

[Javi_GP]

Hoy llegué a casa del trabajo con espíritu lunesco (de lunes, no de luna). Me acordé que tenía que dale una cinta a Merkel y, como ya no sabía si estaba en mi casa o en la de mi santa madre, la busqué y la encontré.
Siempre me veía las carreras de 500 que hay grabadas, pero nunca la de 250, así que, sin pensármelo, me la puse.

Aquella fue un carrerón, o más bien, UN CARRERON.

Ver a viejos nombres como Waldmann, Ruggia, Ukawa, Roberts, Harada, Biaggi, Romboni, Locatelli (este aún da guerra en la misma cilindrada ¡¡doce años después!!), Checa y D'antin. Joer, os juro que parece que fue ayer. Las motos no me parecen tan antiguas de diseño como cuando veo los viejos vídeos de los años 80 o muy principios de los 90. Los cascos, los monos, ya empiezan a tener su colorido, sus diseños, sus mascotas... Tiene un sabor moderno pero con un poso indiscutiblemente añejo, y es que doce años son ya muchos años hasta para un tío de 33.

Repasando la parrilla de salida me encuentro con nombres como Miguel Ángel Castilla, Luis Carlos Maurel, Javier Marsellá y un viejo conocido, Gregorio Lavilla, recientemente proclamado campeón de españa de supersport y tratándo de abrirse paso en las carreras de motos de 2T, como manda la tradición española para bien o para mal. Parece que para ese menester los 12 años no pasan.

La carrera comenzó con un numeroso grupo de pilotos que arriba os menciono, aunque los españoles Checa y D'antin se quedaron atrás. Iban 9º y 10º y en unas 9 vueltas estaban rodando a 8 segundos de la cabeza de carrera. ¿Cómo pudo Luisito hacer lo que hizo?

Mientras atrás se abre un mundo, alante se abre otro, y es que Harada, después de rodar cuarto en el grupo, tranquilamente, calentando neumáticos, cogiéndole el pulso a la pista, decide, a lo tonto a lo tonto y muy a su manera, ponerse delante y escaparse como si tal cosa. Después de esas 9 vueltas (palabrita de honor) el japonés con boca de Cantinflas les sacaba toda la recta de meta a tíos de la talla de Biaggi, Romboni y Waldmann. Casi nada. Verle rodar es como ver a un tío que tan sólo pretende divertirse haciendo trazadas limpias sin importarle un pimiento los tiempos. Ahora freno tranquilamente, ahora acelero sin ansias, ahora tumbo progresivamente y, como si estuviera haciendo un solitario de cartas delante de una candela, va liderando un gran premio metiéndoles un segundo por vuelta a todos los consagrados. Por cierto, su Yamaha no es que fuera un avión de motor, para eso ya estaba la Aprilia de Max.

Mundos japoneses aparte, el resto de la carrera se centra en dos cosas. La primera es ver cómo el grupo se acomoda rodando rápido pero sin prisas y respetándose unos a otros la posición. Juntos pero no revueltos. La segunda cosa es que, atrás atrás del todo, se fraguaba una tempestad que iba a dejar secar al sol jerezano la sal que dió sabor a la carrera. Luis D'antin, con una Honda pata negra pero por su patrocinador más que por medios (MxOnda), iba rodando algo más lento que el incontestable Harada, lo que viene a significar que estaba alcanzando al numeroso grupo que, respetuosamente, rodaba delante de él al ritmo de medio segundo más lento, calculo yo.

Cuando llegó a rueda de Ruggia aún quedaba media carrera (veintitantas vueltas, como de costumbre). Pude oir, una vez más, como Ángel Nieto, detrás de los micrófonos de TVE junto con Valentín Requena, decía aquello de "yo ahora me quedaba detrás un rato descansando", pero parece ser que Luisito no estaba muy por la labor, porque a la mínima de cambio y en la primera apurada de frenada en la que tuvo ocasión, le metió un hachazo al francés con tantos huevos que tuvo que hacerse una tortilla francesa sobre la marcha, y vive Dios que no era fácil pasar a Jean Phillip en una apurada de frenada.

No se si fue que olió el aceite español en la sartén de Luisito o qué fue lo que le pasó a Locatelli, el caso es que se le fue mansamente de alante dejando una posición más al piloto español. Por cierto, Loca levantó la moto y acabó en los puntos.

Ahora tenía por delante a Tadayuki Okada, pero la genialidad del sol naciente la atesoraba por completo el egoísta y menudo Tetsuya Harada, 8 segundos más lejos de esta guerra de cruzada española. El adelantamiento no se vió porque estaban enfocando a Harada en su lección magistral de "cómo ir como un cañón paseando a miss Daisy", pero, visto la sosa carrera que Okada hizo (no recuerdo ver adelantar a nadie, aunque digo yo que alguna debió hacer), creo que nadie hizo eco de la maniobra. Parecía incluso que Okada se hubiera apartado para dejar sitio a la furia española, y a fe mía que hubo mucha porque aquello no había hecho sino empezar.

Con Romboni, Biaggi y Waldmann por delante del español, pero a tiro de arcabuz, se empezaban a oír los vítores de la afición jerezana, sobre todo cuando pasaban por la zona de Nieto y Peluqui. Ya sabéis cómo somos los españoles: tú primero dame motivos y luego ya me haré oir.

Si no recuerdo mal, a Romboni le pasó en la frenada de Dry Sack, al final de la larguísima recta de atrás. Allá en donde hasta se frenan con las cejas. Ver a las dos hondas descomponiéndose de atrás en el rizado asfalto negro que marca la zona de frenada era todo un espectáculo. D'antin, por supuesto, sólo adelantaba frenando. Motor tenía para aguantar rebufos y gracias.
Así que, cuando la afición vió pasar a Luisito haciéndole guiños al colín de la Aprilia negra de Chesterfield que lucía el nº 1, empezaron a prometérselas muy felices. Hoy va a por faena y de la buena.
Efectívamente. No se si sería debido al subidón de adrenalina, a las ganas de agradar al tendido nacional o a que, ya que íbamos con la inercia, "pa qué parar, ¿no?", el caso es que una vuelta más tarde, Biaggi decide quitarse la cinta de la visera justo entre las dos rápidas a derechas que hay al final del trazado jerezano. En esa maniobra, no se, quizás fue tan sólo un ligero despiste, unos centímetros fuera de la trazada ideal, unas milésimas de duda, un qué se yo qué, pero D'antin, perro viejo, Toledana en diestra y Vizcaína en zurda, le metió un HACHAZO por el interior en la rápida de derechas al grito de ¡Santiago y cierra España! que puso la afición entera de pié dándose manotazos en el pecho.
Creo que Max aún está preguntándose cómo lo hizo, porque que él recuerde, Harada estaba mucho más alante y ningún otro podía haber hecho eso. Mientras Biaggi andaba en sesudas preguntas, Romboni le dió un recadito robándole la posición en la apurada de frenada. A río revuelto, ganancia de pescadores.
Roberts Jr, que estaba allí de espectador en palco principal, decidió tomar buena nota de "Ramboni" y le imitó, aunque no se si fue mérito del americano o demérito del descompuesto Biaggi, porque se abrió un espacio de consideración entre la honda nº 9 del español y su portentosa Aprilia nº 1.

La lucha con Waldmann fue otra cosa. Al alemán, como buen sajón, a cabezota no le ganaba nadie y, si recibía una, daba otra. Y así anduvieron ambos unas cuantas curvas cruzando estocadas. Mientras tanto, un poco más atrás pero no mucho, el romano puso orden en las filas y a golpe de pilum dejó atrás a quien tenía que dejar atrás y se fue en busca de los dos locos que delante se batían a cara de perro.
Biaggi, ya más centrado y con el orgullo herido (porque lo de Harada no se lo iba a quitar nadie para el resto de la eternidad), tomó contacto con el duo de cabeza. Había que andarse con cuidado porque en esas refriegas un mandoble o una cuchidada podía caer en cualquier momento y no era cosa de risas. Tanto era así que en la frenada a derechas, en la curva "Nieto", D'antin descubrió su piedra filosofal. Son de esas que ves a uno meter la moto por donde no se debe pero le ves salir de la curva con la moto por donde sí debe. Uno se pregunta, ¿cómo lo ha hecho?, oye, ¿lo podrías repetir? "¡cómo no! - nos dijo D'antin - dame una vueltita y os preparo otra para llevar". Nieto decía que esa noche Luisito había dormido con una lata de aceite en la mano derecha, y se me antoja que muy desencaminado no debía ir el maestro, visto lo visto en la pista.
Así que mientras nos reímos de la ocurrencia del maestro (ahí sí estuvo fino su señoría) el españolito se nos pone primero y por estas, que son cruces, comenzó a meter metros de por medio. Biaggi ataca a Waldmann e intenta irse en pos del español. Una vueltita después y gracias a la recta de atrás, Max se pone a rueda de Luisito. Tres en un puño. Llegan a la curva que da paso a meta, a falta de dos para el final, y los neumáticos de Luis se ponen de parte del romano. El trallazo es duro y seco, pero D'antin lo controla. Pierde dos posiciones con la escenita y es que, como buena película de suspense, algún imprevisto tiene que surgir al final. Todo sea en pos de dar más grandeza a la faena, que muy toreros somos los de aquí como para conseguir los logros sin sufrimientos.
Para más inri, Romboni, que jugaba un papel secundario de cierta categoría (la de 250), se pone a achuchar al español. En Dry Sack ambos se ponen en paralelo con Doriano por dentro, malo malo. Se hunden las horquillas. La italiana primero y la española después. ¡Ole torero! D'antin entra primero a lo Lorenzo, es decir, "por fuera".
A Waldmann le pasa... ¿sabéis por donde?, sí, efectívamente, en esa curva imposible. "¿Alguien se quedó con hambre?" pregunta Luis al pasar, y nos deleita con otra ración de Jabugo del bueno regadita con fino de Jerez. ¡Qué buena esa Luisito!
Sin embargo Biaggi está a una distancia lo suficientemente alejada como para no hacer tonterías en la última apurada de frenada y lo suficientemente cerca como para pensárselo.
Luis, que ya no tenía ruedas, sino carcasas pintadas de negro, decide tapar huecos y cerrar a Romboni que también había dado cuenta del alemán. Aquí el que no corre vuela. Y hablando de volar, Harada ya hacía rato que había pasado victorioso por línea de meta.
Así que Harada primero, Biaggi, con casta de campeón, segundo y D'antin, con más cojon** que el caballo del Espartero, tercero con sabor a victoria, ¡¡y que alguien se atreva a discutírmelo!!
Tanto le supo aquello a carrerón que no fue consciente de que fue tercero en vez de segundo hasta que repartieron el champane en el cajón. Cosas de la euforia, supongo, porque allí nadie le decía una palabra a Luisito, no, allí le levantaron a hombros y le llevaron en volandas desde el pit lane hasta la alcachofa que Pedro Latorre le puso en la boca.
En el box de entrevistas y mientras Luisito se componía los sudorosos pelos que rodeaban esa calvilla tan suya hoy en día, Harada, en pleno contraste cultural, se quitaba el casco con el pelo tieso y seco, sin descomponerse. No se si es que llevaba un secapelos debajo del Arai o es que es tan bueno que machaca sin sudar, el caso es que parecía que venía con el scooter de comprar el pan o lo que los japoneses tengan a gusto tomar a la hora de comer. Habló en japonés, claro, con su traductor al lado.
Biaggi habló en inglés con ese acento italiano tan típico y elogió la carrera tan disputada que hubo con tanta moto suelta por ahí.
En cuanto al héroe nacional, Paco Latorre le preguntaba en directo y con las cámaras de testigos para toda españa y off the record si podía responder en inglés... ya sabéis, "semo uropeo". D'antin, con todo el desparpajo íbero le dice ni corto ni perezoso y bien clarito (porque la alcachofa decidió darse un garbeo cerca de la boca de Luis) que "si es despacio y lento sí". ¡Ahí, con un par machote!
Nieto y Requena estaban mondándose de la risa y, cuando Latorre empieza a preguntar en ese inglés tan castizo que se ha gastado año sí y año también la carrera tan buena que había hecho aquí, en casa, Nieto y Requena dicen que "Paco se está equivocando" por aquello de meter con calzador la lengua de Shakespeare en un acontecimiento con tanto sabor hispano pese a lo internacional. Así que, cuando le toca el turno del menudo piloto español, ni corto ni perezoso empieza a soltar la húmeda en la lengua de Cervantes. Y como si de un pinchazo de rejoneo hubiese sido, ambos locutores sueltan, casí casi al unísono, "¡¡¡Muy bien!!!".

Cosas de españa y los españoles, tan típicas como las sevillanas, la paella, la sangría y la siesta.

Esa luminosa mañana jerezana vió como D'antin subía al cajón, y no fue la última machada del día, no, aquello tan solo fue el aperitivo, porque luego Alberto Puig ya se encargaría de subir al septimo cielo a toda la afición Jerezana. Aquel día sacamos a pasera los galeones de la armada invencible.

Por cierto, ese día ví a Rainey sonreír.

Saludetes.

[Aibo]

¡Yo también quiero! Jaja. Gracias. No me acordaba de esa carrera en concreto,
pero sí del grupito ese.

Joe

[Epicco]

Hola a todos! :P

Javi, hombre!  :P  :P

Se eu tiver a oportunidade de assistir essa corrida, não vou assisti-la!
A narrativa de Javi esta preciosa. Mui buena!!! :P

Saludos,

 :scooter

[wxat]

Chapeau!

No sé si sería ese año (o el anterior o el posterior), el bueno de Luis me dió toda una lección. No estaba yo muy convencido de sus posibilidades reales. Mucho se hablaba de que tenía las NSR más porque podía pagarlas que porque se las mereciera, pero he aquí, que un día llega a Montmeló para correr con la NSR y cae el diluvio universal. ¿Vísteis alguno a Luisito? ¿No? Pues como el resto de rivales. Iba como un torpedo, derrapando bajo el agua como un poseso al abrir gas con la moto totalmente inclinada mientras el resto de parrilla se las veía y se las deseaba para mantenerse de pie. Acabó la carrera, se tomó un par de cafés con leche y luego llegó el segundo, cuando Toni ya se había secado y todo. Ese día cambió mi opinión sobre él. Puede que no fuera el mejor, puede que no tuviera madera de Campeón del Mundo, pero tenía, y de sobras, para merecerse estar allí e intentarlo.

Saludos.

[Kingo]

Grande javi!

Cómo he disfrutado... nunca he visto a Luisito en acción como piloto, pero la verdad es que me has dejado con unas ganas de ver esa carrera...

Unas  :P

[mikemetal29]

Joer Javi_Gp, vaya manera de relatar la carrera, es como si la estuviese viendo  :D Como pase algún director de revista por aquí te fichan fijo  :P  

V´s,
Mike.

[Alexgp]

Hola a todos.

Estupendo y magnífico relato Javi_GP.  :P  :P  :P

[Javi_GP]

A veces me da la picada y me pongo a darle a la tecla.

En concreto ayer, después de ver la carrera por la tele, me entraron ganas de contar algo en el foro, pero una vez me puse las cosas fueron fluyendo hasta soltar el ladrillón. Me divertí haciéndolo y si vosotros disfrutáis, pues joer, miel sobre hojuelas, que de eso se trata, ¿no?

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wxat, la carrera de Montmeló que tu dices, ¿en qué año fue, en el mismo 95?

También recuerdo una temporada de D'antin (su primera en el mundial de 250) allá por el 93. En el Jarama hizo unas primeras vueltas de infarto con un carropolos que era para alucinar. Estuvo tuteando a Capirossi y a algún otro fenómeno más durante unas cuantas vueltas. Pero aquello era mucho arriesgar y estaba cantado que a ese ritmo de stress no iba a poder aguantar más de 5 ó 6 vueltas, así que los que tenían pepinos se marcharon inexorablemente para adelante.

Al final la mecánica manda.

Saludetes.

[Pablo34]

Toledana en diestra y Vizcaína en zurda

Me ha encantado ese toque epico que le has dado a la historia. Parecia que estubiera leyendo el relato de una batalla de Flandes o la de Trafalgar :D  :D

Saludos

[chiachio]

:P  :P ufffffffff, tanto darle a la cabeza sobre quien o quienes deben retransmitir las carreras, en T5 y en la Tve, y aqui tenemos al mejor de todos. a nuestro JaviGp, :P  :P

Deberían ficharte para hacer algún mundial, seguro que triunfas... y nosotros disfrutaríamos de verdad.


Si se pasan por aqui Roselló o D.N. deberían tomar nota y ficharte de compañero de retransmisión, y lo digo de verdad....  :P

[Javi_GP]

Toledana en diestra y Vizcaína en zurda

Me ha encantado ese toque epico que le has dado a la historia. Parecia que estubiera leyendo el relato de una batalla de Flandes o la de Trafalgar :D  :D

Saludos

[snapback]77868[/snapback]

 :  : , es que ahora me estoy leyendo "El capitán Alatriste" y claro, algo se queda en el subconsciente  :

Menos mal que no me he visto recientemente las pelis de George Lucas, que si no...  :


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Jajajaja, chiachio, se nota que eres del sur.  :D Una cosa es escribir, y otra comentar y máxime en directo. Además, aquí se escribe de lo que se quiere y cuando se quiere, y eso vale un potosí que muchos profesionales escritores de artículos de revistas no pueden permitirse (para su desgracia, me figuro) y nosotros sí. Además, ni tenemos problemas de espacio ni de tiempo, y el estilo es el que queramos porque siempre queda entre amigos.

Me figuro que algo similar deben tener los blogs.

Saludetes.

[wxat]

wxat, la carrera de Montmeló que tu dices, ¿en qué año fue, en el mismo 95?

En la primera frase del post ya quería dejar claro que no estaba seguro del año. Tengo dudas, pero creo que era en el 94, porque uno de sus principales rivales era M.A. Castilla y éste fué el subcampeón del Open Ducados de ese año, por lo que si tuviera que apostar, apostaría por el 94, pero si tuviera que jurarlo, no lo juraría...

Saludos.